Lección.

Que amargas son las horas del regreso
Si al abrir la heladera muerto de hambre
No encuentro un miserable queso fresco
Ni una feta de fiambre.

Sigo buscando con mirada torva ,
Separo una botella que me estorba ,
Un paquetito de manteca rancia ,
Y un dulce de batata amocosado ,
Que me dice con tono indicativo
Pertenecer a un tiempo ya pasado.

Solo me queda el consuelo
De menguar esta ansiedad
Razonando con mesura y no con duelo.
Es inútil señalar a quien de esto se haga cargo.
Aprender para el futuro
Y recurrir sin demora
A preparar mate amargo.

Cosas suelen ocurrir en mi bohemia mistonga,
El mundo no se termina y hay que seguir la milonga .

Razonando de este modo
Mi puntaje se rebaja,
Debo meses de alquiler
Al dueño del conventillo.

Se acaban mis pretensiones
De vivir en la bohemia
Y pensando seriamente
Vuelvo a casa de mis padres
A vivir como la gente.

Don Galarraga.

La sala de espera de la guardia del Hospital Felipe Heras fue mi paso obligado para llegar diariamente al servicio de Cirugía
-“Qué tal , Don Galarraga”.- era mi saludo habitual . Hacía un año que lo había operado un sábado a la noche en una de mis guardias . Jugando al truco y por diferencias en la cuenta de los porotos que marcaban los tantos , su ocasional competidor , sin decir “agua va “ , le abrió la panza con un marca “Arbolito”de 25 centímetros de largo , y para llegar completo al hospital un comedido le metió las tripas por el mismo lugar de salida , subió con él a la ambulancia y se las llevó sosteniendo, hasta que lo bajaron para meterlo en el quirófano ; hazaña que al hombre lo hizo famoso en el barrio del Paredón , donde había ocurrido el hecho . Era un puestero que tenía su rancho en la Pampa Soler , nacido y criado en esos montes , como solía decir ; lo primero podía ser cierto , lo de haber nacido ,-digo-,por que en cuanto a lo de criado dejaba dudas ; el hombre era mas bien petiso.
Esta gresca son parte de las historias de aquellos viejos boliches . Nadie se acordaba como iba la partida hasta ese momento en que acabó violentamente y aunque por largo tiempo siguieron los comentarios sobre las causas desencadenantes del entrevero , no valía la pena seguir buscando , porque con vino y ginebra a mano los motivos no pesan mucho.
Al quirófano entró casi sin presión arterial , había perdido mucha sangre y hasta que el cardiólogo no dio vía libre la operación no empezó.-“Está pálido como chorizo e´puchero”- comentó alguien. La puñalada fue a la altura del ombligo , por lo que ampliando el tajo hacia arriba y hacía abajo me dio buen campo para explorar aquel pantano de tripas , caca , mugre del piso de ladrillos pegoteada en la caída y revolcón , microbios que no se ven , pero están , y sangre a borbotones que sigue saliendo por la brecha de su abdomen. Litros de suero vierte una enfermera en la cavidad mientras uno de los ayudantes aspira continuamente arrastrando por el tubo el líquido que entró , restos de comida y la sangre acumulada que seguirá saliendo hasta localizar el lugar de la hemorragia . A dos manos me abro paso entre asas intestinales que viborean escurridizas , localizando y ligando los vasos sangrantes cortados al paso del cuchillo.

*

El gran cirujano Leriche decía , que en el espíritu quirúrgico , se equilibran la intrepidez, la confianza en sí mismo y la seguridad en tomar decisiones , lo cual implica que debe ser prudente por temperamento y temerario por experiencia . Suturo cuatro heridas en el intestino delgado , por donde salía contenido fecaloide y lechoso , porque el trágico partido de truco era el corolario de un asado en los fondos del boliche , festejando no sé qué evento y rociado con bastante vino.
-Las cosas no vienen solas .- comentó don Ayala, el bolichero , moviendo la cabeza a izquierda y derecha mientras subían el herido a la ambulancia.
Continuamos el exámen minucioso hasta que todo me parece que está en orden , ningún vaso sangrante ni tripa abierta .
El silencio en la sala habla de la tensión y gravedad del caso . Pero el paciente ya no sangra y la presión arterial se va normalizando , me comunica el anestesista en tono tranquilizador .Se hizo todo lo que se podía hacer .
Por primera vez desde el comienzo ,desvío mis ojos del campo operatorio mirando de reojo la cara del paciente. Le han vuelto los colores porque le ha vuelto la vida . Como la muerte tiene su máscara , la vida muestra la suya . Y siento regocijo interior , un mudo grito triunfal , el orgullo acallado por imperio ético y mesura que me recuerda que sólo estoy cumpliendo con mi deber. En el quehacer médico los triunfos y derrotas marcan el ritmo de nuestras batallas ; lo efímero de las cosas ante los avatares de la vida.
Lo álgido de la operación termina .Miramos hasta el último rincón de aquella cavidad que ahora está limpia, que ningún vaso sangra, ni sale caca de ninguna tripa.

Bueno-vamos-digo a mis ayudantes .Frase tantas veces repetida en la jerga del quirófano, que significa, la operación terminó, ahora sólo hay que cerrar-. Y todo el mundo se relaja y empiezan los comentarios.
El policía de guardia que registra las entradas por hechos violentos, recoge chismes entre los que acompañaron al herido, y entre los que vinieron a interesarse por su estado.

El personal circulante de cirugía ya tiene datosy pormenores, aumentan los comentarios y pareceres, nos ponemos locuaces, dicharacheros, eufóricos, después de tanta tensión.Todo termina bien, el paciente a Unidad de Cuidados Intensivos y nosotros a lo nuestro.

*
Con dos meses de internación pueden pasar dos cosas: que ya no vea la hora en que el paciente se vaya ,o que el cariño que se ganó, no termine con el alta, extrañándose su ausencia. Don Galarraga pertenecía a esta segunda categoría. Durante su permanencia en la sala 5, era amable, respetuoso, agradecido con todos. La palabra gracias¡no le faltaba después de cada acto médico o enfermeril, a una revista alcanzada, o al recibir la bandeja con comida.
Observador nato, semblanteaba a todos y entrado en confianza, mas de una vez me dijo-“hoy no anda bien doctorcito”-, nunca erraba.

Restablecido completamente, llegó su día de alta y no hubo disimulo. Con abrazos y lágrimas ,daba rienda suelta a sus emociones, sin que faltara algún comentario de gratitud, porque era extrovertido y en el apretar de cuerpos, trasmitía la sinceridad de sus palabras.

*
Pero todos los viernes, mi día de consultorio externo, en la sala de espera, lo seguía viendo sentadito y bien vestido como en domingo.
Al salir, después de atender a todos los que tenía en lista, Don Galarraga ya no estaba. Llegué a pensar que otro médico lo asistía, por algo ajeno a la cirugía. Y asi pasaron los meses con sus viernes incluídos y él siempre firme en su puesto.Ya se había convertido, para mí, en esa clase de pacientes, que por lo antes narrado, ningún médico los olvida..
El hombre es curioso por naturaleza, y el médico lo es un poco más.
-¿Qué pasa Don Galarraga, que todos los viernes lo veo esperando?-
-Nada, doctorcito-me contestó levantando los hombros.-De agradecido nomás-
-Ví tan cerca la muerte que nunca pensé que saldría de aquí-
-Como todo jubilado me sobra tiempo, y vengo al pedo nomás,- como diciendo a la muerte:”¡-tomá pa vos!”-
-Me quedo un rato y me voy.-

Carolina

La llamaban Carolina , pero ese nombre lo tomó después. Cuando la conocí , allá por el cincuenta , la llamaban simplemente Lina . Las cosas le fueron bien . Era la pupila más solicitada por los parroquianos. Había quienes la esperaba un par de horas hasta que le llegara el turno, pero querían con Carolina. No sabía, ni le gustaba hacer nada . No llegaría a ser una buena ama de casa , pero sí un arma de caza. Con el cuerpo que ostentaba tenía presa asegurada , cetrería garantizada frente al halcón elegido.
La Celestina decidió cobrar más por sus servicios y de allí surgió la idea de cambiarle su nombre por otro que resaltara mas sus condiciones, o simplemente que fuera mas sonoro. Para no alejarse tanto la llamaron Carolina. La Lina no protestó - ¿ qué importancia tenía ¿- lo que había que hacer era lo mismo , y dicen que le gustó el llamarse Carolina , que le sonaba mejor , como algo que iba rodando…y no estaba equivocada , sin darse cuenta era algo que iba rodando.- Siempre la misma cara : los labios finos, pegados , comisuras hacia abajo , como un arco iris de un solo color : rojo, que le daba una expresión de sonrisa dudosa , porque no se sabía si empezaba a reirse o terminaba de hacer un “ puchero “.
Era de buen carácter . La única vez que la sacaron de quicio poniéndola furiosa fue aquella noche en tiempos de la Feria Rural , cuando un paisano venido de Federal se sacó su cinto- rastra tachonado de monedas , la camisa y el chaleco , dejando el torso desnudo , dejándose la bombacha bataraza y las botas con enormes nazarenas puestas .- ¿ Vaya uno a saber ¿.- de prudente nomás . Después de cuatro días fuera de su querencia, sin lavarse los pies y sin cambiarse las medias, el hombre desconfiaba de su natural perfume . Había estado trotando por la pista tironeando del cabestro al aspirante a campeón y natural era su criollo pudor.
En su quehacer erótico Carolina gustaba dejarse las medias puestas ,le parecía mas sexy. Hojeando “ Para Ti” en horas de poca clientela, había visto modelos con piernas que según ella, parecían las suyas.
El enganchón fue tan grande, con un desgarro tal como el viaje desde la Barra de Cuarein de donde la bagallera brasilera se las había traído .
No eran comunes esos arranques en Carolina , pero de un manotón tiró el velador y todo el quilombo quedó a oscuras porque junto al velador cayó una jarra con naranja Urreta que fue a dar a un enchufe . Entre los que esperaban turno había quien entendía de cables y entre varios comedidos , con fósforos y encendedores se terminó el apagón. Dicen que el paisano no se repuso ; nunca había oido hablar de inhibición psíquica , pero se vistió y se fue , sintiéndose tal vez menos gaucho que a su llegada. La Celestina se tragó la bronca y no dijo nada . Carolina daba buenos dividendos , bien valía un apagón. – No era el sumun de la belleza . Sus rasgos mas bien ausentes , pero su piel entre aceituna y parda la hacía distinta. - ¿ distinta a quien ¿.-pienso ahora ,pero ella era algo especial . Su cabeza asomaba graciosa detrás de un par de senos bien proporcionados que apuntaban hacia arriba como palomas listas a volar o como dos cañones por cuyas balas quería uno ser alcanzado . Chica su cintura y generosa grupa , sabía como gustaban aquellos dos hoyitos que a cada lado de su columna marcaban el final de la espalda y el nacimiento de sus nalgas . De coqueta nomás , cuando podía , se daba vuelta como buscando algo para que su eventual pareja se deleitara mirando. Al evocarla me recuerda aquellas andaluzas pintadas por Julio Romero de Torres ,muy lejos de las cabareteras lechosas de Toulouse Lautrec ni las flacas de mirada expectante de Modigliani .
Se me ocurre que algo así habrá sido la Malinche , precioso regalo que el cacique de Tabasco le hizo a Hernan Cortéz y que Don Pedro de Alvarado , el poeta que trajera en su expedición ,describió con tanto ardor : “ hermoso ejemplar de hembra tostado por el fuego del sol mejicano” , o así la habrán visto aquellos rudos extremeños , pero españoles al fín , despues de largas abstinencias atravesando mares y selvas .

Los años pasan , las cosas que fueron, dejan de ser . Mucho queda en el olvido . Es mentira que “ veinte años no es nada “.
Yo volví a mi patria chica .
Nunca juego a la lotería . Me conmovió aquella vieja de melena desgreñada que me extendía un billete con mano sarmentosa . Reconocí aquellos labios apretados , curvos hacia abajo como un arco iris . Habían perdido la sonrisa dudosa y ya no eran rojos.

Nubes.

A la sombra de un naranjo descanso en paz mirando el cielo azul en una de las tantas siestas en la quinta.
El viento deshilacha las nubes , arquetipo de lo fugaz y transitorio. Las barre como plumas por la brisa de aquel verano sofocante y sensual.- Las miro sin pestañear , sé que estarán poco tiempo . La nube no espera . Invitación a la nostalgia , aunque el adolescente tenga poco material para nombrar ese sentimiento que en aquel momento me invadía .- No sabía que aquello era nostalgia.
Hoy me abruma aquel pasado al saber que estoy más cerca del arco iris . Nada para , todo fluye.
-¡Como te vas , vida mía ¡.-

Catalina Marginot

Catalina Marginot viene arrastrando sus carnes caducas
por la ancha vereda de la Plaza Santa Rosa.
El “tira” viejo la deja pasar sin verla
Su tranco indolente , su grasienta melena de rubia usurpadora.
Con su mirada triste y perdida
Soñadora de tiempos que ya fueron
En los salones rojos de “Madame Safó”;
Nobleza prostibularia de la calle Pichincha

-¿ A quien atrapa con sus alas rotas Catalina Marginot ,
la caduca estrella de quilombos viejos ?
Un tufo agrio y estridente de sus carnes gastadas
de golpes y de camas cómplices.
Ya todo quedó en aquel pasado de halagos mentirosos
Y del abismo que no intenta ver
ya brotan vapores de finales
que no quiso imaginar.

*

La conocí ya vieja y vencida por los años y la vida en aquella milenaria profesión.Rosario, año 1959.- Catalina era el tributo quincenal y rutinario de Moralidad Pública; desvergonzado nombre de una sección de la División de Investigaciones de la Policía ; dirigida por inmorales y corruptos inquisidores vigilantes de la moral y buenas costumbres de la sociedad.

Aquella playa del papel

Dosificar la nostalgia es una imposición que a veces cuesta cumplir a rajatablas para no comvertirla en melancolía.Ante un hecho determinado surge la reacción “resorte”espontánea con escasa o nula autocensura previa, felizmente interfiere y saca del apuro el raciocinio.
-¿Y a qué viene esta reflexión?-
Porque llega a mi memoria una vieja estampa que creía olvidada, tal vez de alguna revista española de las tantas que se acumulaban en la piecita del fondo de casa de la abuela Petra:”Ilustración artística”, “Mundo hispánico”, entre tantas.-“Costa andaluza”, rezaba al pie de la hoja. Era una playa con fondo de dunas bajas cubiertas de arbustos que me recordaban las cinas-cinas que abundaban en mi zona de quintas de naranjales y viñedos.Por esa playa caminaban a pasos que imaginaba lentos, dos burritos, uno detrás del otro, y ya adolescente, relacionándolos con mis lecturas y clases de Castellano, si uno de esos burritos no sería” Platero”. Dos baturros completaban la escena. A mi madre le gustó tanto aquella lámina, que decidió enmarcarla y llegó a formar parte de nuestro living-comedor de la casa de la quyinta. Hubo mudanzas qub avatares de la vida exigieron, la quinta se vendió y la familia fue a vivir a la ciudad y con el tiempo la familia se fue desmembrando con el casamiento de mis hermanas y mi marchar a Rosario para estudiar Medicina.tres mudanzas, hasta la última en que recuerdo el cuadro. Después de la muerte de mis padres, lo perdí de vista y hasta creí que también en mi memoria. Pregunté a mis hermanas por el destino de ese cuadro de aparente sencillez, pero tan significativo para mí y aunque no con mi obsesión, ellas también lo recordaban colgado en el comedor de la última casa en que vivivieron.
Quedaron pensativas y tristes con mi pregunta y yo se por que o quiero presumirlo…-esa costa andaluza contempló nuestros juegos de niños, con la victrola, la radio a baterías y la lámpara “Aladino”. Mi teatro de títeres, nuestras revistas para cortar figuritas, la tijera de punta redonda y en invierno el brasero con el tarro donde hervía el agua con hojas de eucaliptus, para calentar el ambiente y matar microbios, como decía mi madre, muy convencida mientras esperábamos la llegada de nuestro padre para la cena.

*
Quiero pensar que aquella playa de papel que contemplaba nuestros juegos, voló

Meditaciones del atardecer

17-2-08.
Desde hace 6 años en que colgué “La última chaquetilla”, las cosas cambiaron y para mucho.-Dejé de ejercer como médico; no dejé de ser médico; lo seré hasta que muera , no por que el título no caduca, sino por que me siento médico en todo momento y actos de mi vida , obro como médico, siento como médico.. En estos años he leído mucho más de lo imaginado, un sueño dorado cumplido.Tengo mas tiempo para pensar , sin dejar de pensar en lo que dijo Giordano Bruno:” Cuando se piensa demasiado se aburre uno de vivir”, pero ningún refrán , venga de donde venga , lo tomo al pié de la letra.
Ya no debo preocuparme pensando si el paciente que operé ayer de una obstrucción intestinal ya eliminó gases, está orinando lo suficiente o levantó fiebre o si la de diverticulitos sangrantes, dejó de sangrar.
Y este es ahora mi problema: no tener problemas.Estoy preocupado por no tener que preocuparme.
Extraño el calor humano del paciente, ese pin-pon de flujo sentimental entre ambos, esa compenetración mutua que siempre percibí , o casi siempre, con mis pacientes, por eso nunca habìa pasado por mi cabeza “ dejar de ser médico”, no me importa pecar de vanidoso.Esta fue la ambrosía que alimentó mi vida por mas de 40 años , porque ya siendo practicante ese contacto me sedujo y no tengo duda que fue lo mas importante de mi vida.- ¿ Será parte de la tragedia de la vida?.-Tambien tengo escrita reflexiones que no tienen este tono trágico , tan, pesimista aparentemente, se que sólo soy realista.A lo largo del día cambiamos continuamente.. y la vida vale la pena.
He leído muchas veces y desde hace mucho tiempo, “El mundo visto desde los 80”, de Don Ramón y Cajal y “Charlas de café”, por no nombrar todo lo que este sabio ha escrito. Junto a Unamuno, Marco Aurelio, Giordano Bruno, Lubock, Emerson, José Ingenieros, Sarmiento, Alberdi y otros mas, son mis guías y confesores a quienes siempre pido ayuda ; cada uno, según el tipo de consultas que debo hacer y nunca me defraudan.
En algún escrito anterior digo que en mi vida tuve pocas desilusiones por que nunca exageré las expectativas.Ya no pienso lo mismo; tengo desilusiones , con sus consecuencias: la tristeza que me es el peor de los sentimientos, el que me hace caer los brazos y tambalear en la marcha hacia delante, pero siempre se sacan fuerzas para reponerse; pero todo esto es parte de la vida misma y no caben reclamos, las cosas son como son y no pensar que somos imcomprendidos, ese sentimiento tan denigrante con los que muchos no se hacen cargo de sus responsabilidades perdiendo la dignidad, ese sentimiento tan español que no quiero perder.Para eso me he pavoneado toda mi vida teniendo como paradigma al Caballero español, estonces, aguantarse sin chillar.
*
Me sigo interesando por las cosas. Hace tres años me di cuenta de que todavía no me iba a morir,aunque con 76 años esto puede ocurrir en cualquier momento sin que la parca tenga que pedirme disculpas; pero me dije: si es así, pues a seguir viviendo.Me gusta y gozo de la buena mesa, de los buenos vinos y de la buena cerveza y del bajo nivel en los placeres de la cama sería necedad protestar sin pedirle a la naturaleza más de lo asignado, me consuela el haberlo aprovechado cuando pude y la cama tambien es buena para dormir.
- Yo, que viví “ un contínuo fluir de emociones , en renovación perpetua , empezando a vivir cada día”, al decir de mi querido paradigma Unamuno.
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Meditaciones del atardecer 3

Detesto lo que sea simulación.Nunca me teñi el cabello ni usé peluca ni implantes de ningún tipo.No tendría autos con vidrios polarizados ni me ocultaría detrás de un pasamontañas con un garrote en la mano.

*
Meditaciones del atardecer
Opinar y decretar.
Respeto a quien opina , no al que decreta con intolerancia y autoritarismo, que no es lo mismo que opinar con autoridad.
-¡ Vos estás equivocado!- es lo más agraviante que puedo escuchar.

*

Miro hacia atrás, analizo mis años vividos. Paradójicos , contradictorios y me parece bueno que así sea por que son auténticos. Me dicen: -este soy yo- , cambiante, siempre detesté la monotonía , lo siempre igual, la fidelidad estúpida a cánones establecidos y aceptados como si fueran virtudes indiscutibles.
Decirle más seguido al “otro”:- Tenés razón.- es señal de seguir aprendiendo. Vivo con la verdad penúltima defendiendo la duda.

*

La vida es un libro que vivimos leyendo , pero hay muchos miopes.

*

A loa gente y a las cosas las matamos cuando las olvidamos , está vivo todo aquello que recordamos.

*

Seguiré vivo y sintiéndome bien, mientras conserve la capacidad de enojo.

Meditaciones del atardecer.



“Búscanse para descansar las apacibles soledades del
campo, en las orillas del mar,en las montañas…
en un capricho vulgar, no consiste sino en recogerse a
cualquier hora, dentro de uno mismo”.

(Los doce libros, de Marco Aurelio.)

Yo agregaría que “las pequeñas soledades”se logran en los ocasionales viajes, en el remanso de una tarde junto al lago, en nuestras rituales siestas pueblerinas y en ese retiro interior, que a pesar del bullicio cotidiano, todo hombre puede lograr.
Y no hay fuerza que nos prohiba usar de nuestra libertad de pensamiento.
“Pienso, luego existo”.-el concepto cartesiano sigue vigente.

El aforismo es el recurso de un filósofo frustrado.No le dio para más y se quedó en el pensamiento corto.
Cada aforismo tiene su “contraaforismo”: -No por mucho madrugar se amanece más temprano-versus-Al que madruga Dios lo ayuda.
No sirven para nada ,son simples ejemplos dialécticos, juegos de sofistas amateurs.
Conclusión:el aforismo es desconcertante, sólo entretiene. A mucha gente los ayuda por su efecto complaciente.Quién lo dice, lo repite y cree estar en lo cierto, mejora su autoestima, entonces sirve para algo y para alguien.
Después de leer aforismos, sacamos conclusiones ilusorias.Lo ingenuo de estas verdades, nos hace pensar que todo está resuelto.El colmo del conformismo, los menos interesados seriamente en los problemas de la vida son los más proclives a guiarse por ellos, y les resulta muy cómodo.
Me gustan las contradicciones.
Algunas veces en serio, otras, en solfa, según mi estado de ánimo del alegre itálico o del trágico español;acorde al gen dominante, o al más despabilado en el momento de escribir.
Esta es la vida. Combinación y alternancia. Choque y conflicto.Racionalista y soñador.
No hay nada menos serio que tomarse demasiado en serio.
“Como todas las substancias corrosivas, el ingenio y el humor tienen que utilizarse con cautela”
Georg Christoph Liechtemberg.



Ser alegre es estar contento hasta los lunes.
La mejor caricarura me la hizo el tiempo y el espejo me la muestra cada mañana.
*
Siento el peso de mi larga historia y su añoranza me duele.
*
Vivir es estar al acecho,todo puede ocurrir.
*
No es necesario ser solemne para tomarse las cosas en serio.
*
En la mayor parte de la gente la voluntad no va mas allá de un simple deseo.
*
Lo cotidiano es lo verdaderamente transcendental; lo que echamos de menos cuando falta.
*
Nada mas inverosímil que verdades absolutas.
*
La duda es el motor conque avanza el mundo.
*
El tiempo está a disposición de todos; como aprovecharlo, queda a cargo de cada uno.
*
Vivir es ir sacando conclusiones.
*
Esperar es el ejercicio mas violento que muchos hacen a lo largo de su vida.
*
Hablar de uno mismo es un tema interminable, y para el otro, insoportable.
*
La falta de esperanza hace feroces a los hombres.
*
Las ternezas, me hacen llorar, pero la ira apaga mi llanto, y afirma mi postura ante la vida.

*

Toda muerte redime.
El hecho de morir nos hace buenos.
En ninguna placa dice: “Aquí yace un desgraciado que en la vida hizo otra cosa que daño”.
*
Vivir es participar en la comedia.
*

La vida es una partida de ajedrez. Mover las piezas acorde a un plan establecido sin olvidarse de tener en cuenta los movimientos del otro.
*

Cuando me siento mal, hasta el mundo me queda chico.

*

No hay promesa más sincera y vulnerable que la de los enamorados.

*

Es malo no tener sueño; peor es no tener sueños.

*
Lloro por las vidas que ya no podré vivir.




Me iluminó el Aretino
No hay mejor sala de acuerdos que una cama de dos plazas.

*

Me contó mi mujer que leyó en una revista lo saludable que era para una pareja mayor, hacer el amor tres veces a la semana.No me atreví a preguntarle si leyó la letra chica.

*
Es indiscutible la fidelidad de Eva.

*

Un malevo del 900 sería hoy un amante torpe;su machismo lo haría aburrido para una mujer moderna.


A mi edad no enciendo hogueras, pero no quiero perder mi llama piloto.

*

Dedicatoria en un libro que regalé a mi mujer: “A mi mujer, mi gran amor,mi mejor amante, mi mejor amiga”.

*

Esperar a una mujer tiene algo de agonía.

Lleno mis ojos de cuerpos perfectos,enturbian mi entendimiento,perturban mi paz,exalta mi imaginación; pero una voz interior me recuerda que la naturaleza tiene sus tiempos y que se cumplen en forma inexorable.

*

Dios creo a la mujer para complicar las religiones.

*

Hay algo inquietante en el ambiente: hay una mujer.

*

Acumulo recuerdos para llenar el vacío que dejaste.

*

Hay mujeres que semejan perritos falderos; mueven la cola para llamar la atención.

*

Una conversación sin mujeres tiene algo de dietético; le falta sal.

*

Hay mujeres con nombres de flores: Rosa, Azucena, Violeta; son las que adornan el jardín de la vida.

*

Los lances amorosos que cuentan los hombres en sus memorias los enaltece, los que cuentas las mujeres, las condenan.

*

Huir de la tentación, pero no tan rápido como para no ser alcanzado.



-¡No me vengas con cuentos!.-Se lo habrán dicho alguna vez a Sherezade.

*

Había cambiado mucho, hacía años que no la veía; la recordaba como una chica tímida,insignificante, sin dejar nada a su paso.Ahora su expresión corporal anunciaba su presencia. Lo que mas me impresionó fueron sus ojos.-Ya no miraba, imploraba.-

*

Un buen marido debe conservar a través del tiempo, un niño dentro y un sátiro latente.

*

Con manzanas tentadoras, Río Negro podría haber sido el Edén.La Biblia dice: “comieron, se abrieron entonces los ojos de ambos y supieron que estaban desnudos”.-Conclusión: el comer manzanas cura la ceguera.

*

Los bostezos de parejas son las cachetadas del amor.

*

Hay hombres que se jactan de su moralidad en cuanto a fidelidad conyugal gracias a la implacable declinación biológica que le traen los años.

*

Después de una noche de amor, un matrimonio no sólo se encuentra mas unido, sino que se sienten cómplices.

Meditaciones del atardecer

Sin darse cuenta la vida lo pasó por encima.
*
El ser humano es estúpido y como tal, peligroso.
*
El mérito no es vivir,sino que hacer con la vida.
*
La vida es una guerra y cada día una batalla a ganar para seguir haciendo historia.
*
No me preguntes qué pienso,pregúntame qué hago.
*
Las cosas no son como fueron sino como las recordamos.

*
Nos parecemos al gato; nos gusta que nos acaricien el lomo.
*
No quiero decaer; quiero caer.
Decaer es agotarse, declinar,caducar, flaquear.
Caer es definitivo; menos degradante.
El que cae desaparece, se va, sucumbe, deja de ser.
Lo recordarán como fue en su esplendor. No tendrá testigos de su decadencia , por que no la tuvo.
*
El hombre.El eterno inmaduro.
Una parte de la humanidad, creyéndose más cuerda y formal, se ocupa de la otra mitad creando instituciones y mecanismos de control para vigilarla.
Delinquir, alterar el orden natural es la tendencia compulsiva.
Sin control, se desvía y viola el derecho ajeno.
El hombre es el único ser viviente que “ se porta mal”.
Niño durante toda su vida.- El pone sus límites y él mismo los viola.
En ese falso control y búsqueda del equilibrio ideal consume su energía.
De su conducta derivan las guerras.Quizá sean imprescindibles para mantener el equilibrio ecológico.
*
El peor de los defectos es desconocer los nuestros.
*
Para muchos, entre lo intolerable está el éxito ajeno.
*
Hay quien aparenta ser bueno por que está de perdedor.
*
Vida y muerte.Dos palabras femeninas.En la mujer está todo el misterio de la vida.
El Alfa y el Omega.
*
Ser valiente no es desconocer el miedo; es enfrentar el peligro a pesar del miedo.
*
No creo en el diablo, pero lo tengo en cuenta para justificar muchas cosas.
*
Desconfío de la casualidad. Ocurre que no siempre conocemos las verdaderas causas de aquello que recibimos como efecto.
*
No necesita halagos quien escucha el aplauso de su conciencia.
*
Ser muy crédulo es una enfermedad, pero cura con el tiempo.
*
Detrás de un violento hay un cobarde.
*
La Muerte.
Es lo que vamos postergando a medida que vivimos.
*
Ir a un velorio es la forma mas segura de sentirse vivo.
*
Viejos tiempos; épocas de policías aburridos.
*
La incertidumbre es lo que da encanto y sabor a la vida.
*
-¡Qué bien conservado estás!.-
Piropo que me hace sentir un frasco de pickles.
*
No es lo mismo vivir mucho que tardar en morir.
*
Era feliz soñando; pero usé la razón.
*
Sin sueños no se logran realidades.
*
Soledad y felicidad son incompatibles; la felicidad llega sólo compartida.
*
A veces me resulta difícil convivir conmigo.
*
El paso de los años me hace avaro con el tiempo.
*Ningún virus o bacteria ha logrado superar el poder destructivo del hombre.

El gendarme

Todos los días lo vimos pasar por la vereda, frente a la casa de la abuela Petra. Sentados en el umbral nos parecía muy alto, bastante morocho, levantados sus pómulos, con aire aindiado y con pinta de Jack Palance; prototipo del villano de película; nos hubiera perecido a Atila si no fuera tan alto. Tal vez nunca se fijó en aquellos gurises que lo veían pasar. Su gesto era fiero. Mas que pasar parecía desfilar por la vereda con su uniforme verde, golpeando fuerte los tacos, haciendo sonoro y rítmico su andar con impertinente gesto irónico y siempre mirando hacia delante. Nos pasaba casi rozando ,pero nunca se dignó mirar a esos gurises , como si no fuéramos dignos de su atención , detalle que aumentaba nuestra inquina..Eramos los 5 o 6 integrantes de “ la barra de la esquina”; casi todos hijos de ferroviarios. Los de aquellos que ocupaban puestos jerárquicos , eran antiperonistas,los de menor jerarquía, todos peronistas .Maniqueismo de la época..Se era peronista o antiperonista.,diferencia que nunca empañó nuestra amistad. Por el gendarme compartíamos in sentimiento común: miedo y odio.Yo, como “ contrera”, lo tenía muy claro. Relacionaba todo lo uniformado con el peronismo y eso ya era suficiente para emitir juicios .Los únicos uniformados que me resultaban simpáticos eran los del Ejército de Salvación, que los teníamos en el barrio, el cadete de Gath y Chavez y el acomodador y chocolatinero del Odeon.En el barrio se rumoreaba que el gendarme de esta historia le había puesto el caño de la pistola en la boca de un chico por que no quería gritar -¡Viva Perón!- y que intencional o no el tiro había salido matándolo en el acto.El ambiente político de la época hacía creible semejante versión por mas irracional que fuera..Formaba parte de los miedos cotidianos.Nunca supimos que había de cierto en aquella historia , pero con ella nos quedamos y con el miedo consecuente.
Cincuenta años después , este gurí volvía a Concordia con su flamante diploma de médico y a casi 20 años de la caída de Perón ,allá en el 55.Aquel temible gendarme con estampa de S.S había quedado sepultado entre los tantos recuerdos de mi niñez.. Un día aparece en mi consultorio , ya con cara de viejo. Tantos años pasados habían borrado aquel gesto fiero, haciendo de él ,solo un anciano feo.
Hemorroides de vieja data con fluxiones periódicas motivaron su consulta, que se fueron repitiendo y cada vez el vínculo afectivo se hacía mas estrecho. Charlando lo”llevé” al pasado, a nuestro viejo barrio de la Estación Urquiza, donde vivíamos.Me aseguró recordar a los chicos sentados en el umbral del zaguán de la calle 9 de julio, pero fue por cortesía, no queriendo desinflar mi globo de nostalgia que pudo ver en la expresión de mi cara. Me contó que tenía una hija y un hijo casados, que habían mitigado su viudez dándole un nieto cada uno. Ya hacía algunos años que había muerto su esposa._ Nunca me pude consolar._ me repitió muchas veces .Con el tiempo, toda la familia pasó por mi consultorio por diversas afecciones creándose entre nosotros un sentimiento donde los temas iban mas allá de lo estrictamente profesional.
-¿ Sería cierta la versión que en aquellos años corría por el barrio?.-Prefería creer que aquello no ocurrió, que era obra del encono que en ese entonces enturbiaba nuestro juicio.
Operé sus hemorroides a ese viejo gendarme.-¡Ironías del destino!.-Tanto miedo le teníamos y después con que mansedumbre , en posición de” plegaria mahometana” se sometía a mi profesional tacto rectal., algo impensado, tal vez, si conservaba algo del machismo peculiar de cualquier integrante de las fuerzas armadas.

Angel Oscar Cutro (2008)

Caracol

En el fondo de la casa con tupido tartagal
De la tan querida y recordada abuela Petra.
Un caracol con mucha ambición y poco tino
De sopetón abrió una inmobiliaria.

Demostró escasa visión aquel molusco
Que mal miró el mercado prometido;
Tal vez envanecido por supuestos galardones,
Vanidoso de ser un pulmonado
Que bautizó Linneo sabiamente
Del orden de los muy encopetados
Y distinguidos estilomatóferos

Insistió con tesón vender lo fabricado,
Eran casas seguras, livianas, brillaban
Con el sol que del cielo recibían .

Arrastrando su panza pegajosa
Un viejo y sabio caracol llegó a su lado,
Miró con ternura al hacedor de sueños
-Erraste de lugar, molusco apresurado,
aquí entre caracoles todo el mundo ya nace
propietario consumado.

Llegate al pais de las babosas
Muestrales con entusiasmo tu muestrario persuasivo
Y tu suerte ,seguro ha de cambiar
Sin cambiar la costumbre que te anima :
La costumbre de soñar.

Alguien lloró en mi velorio

A la zaga de las grandes ciudades , los pueblos del interior siguen cautivos, felizmente para los nostálgicos, de muchos hábitos y costumbres que el llamado “ progreso “ inexorablemente los va desechando y cambiando por otros nuevos ; mientras tanto, dan lugar al goce de experimentar y tenerlas en cuenta , dando origen a sentires y reflexiones como las que motivan mi relato.
Como “ nostálgico incurable”, como dice el viejo valsecito criollo, todas las tardes leo “El Heraldo”por internet yendo sin más demora a la página fúnebre . Como chiste macabro repito el mismo libreto :- lo hago para ver si figuro en la lista .- si no me encuentro, sigo viviendo tranquilo.-
*
Hace unos días muere en mi querida Concordia un pariente cuyo grado de parentezco ninguno de los dos pudimos dilucidar con exactitud , detalle que nunca nos importó por tratarse de algo secundario al afecto que mutuamente nos ligaba desde siempre, relación fortalecida con los años en que se agregó mi condición de médico de toda su numerosa familia y muchos de ellos sangraron alguna vez bajo el filo de mi bisturí .
Hasta hace mas de siete años , en que por motivos que no vienen al caso , después de ejercer mi profesión durante mas de cuarenta años, vine a vivir a Buenos Aires.
Mi pariente se llamaba Angel , como yo, nombre adecuado para pasar el resto de su eternidad en ambiente celestial al que yo no tengo prisa ni esperanzas de llegar.
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Mi condición de jubilado me permite disponer de tiempo para reflexiones y elucubraciones filosóficas e imaginativas facilitadas por mi natural tendencia a desarrollar con placer veleidades literarias que ocupan mis horas de “ el reposo del guerrero”, imaginándome situaciones y hechos posibles que satisfacen mis tendencia lúdicas .
Fantaseaba imaginando escenas acorde a las viejas y arraigadas idiosincrasias peninsulares del sur , la Basilicata.- Desfilaban revoloteando alrededor de mi cabeza , alaridos de llanto con simulacros de rasgadas vestiduras , crisis histéricas con desmayos espectaculares y comedidas abanicando a la posesa con revistas o elementos a mano adecuado para el caso.
Conociendo la personalidad de Angelito , como lo llamábamos cariñosamente , suponiendo exageraciones por su fama de buena persona en toda la extensión de la palabra, lo consideraba merecedor de semejantes manifestaciones al final de los 93 años bien vividos, bien gozados y bien queridos en que dejó su existencia .
Era un tipo jovial, dicharechero oportuno e ingenioso , rápido y agudo en sus contestaciones , quedándose con la última palabra, mientras su interlocutor se reía por la ocurrencia escuchada.
Hasta que las limitaciones antropológicas que el tiempo le fue imponiendo , mi homónimo fue un Don Juan a la italiana con marcado toque criollo en su delicada rusticidad y aun reconociendo las grandes diferencias culturales nunca dejé de compararlo con el inolvidable “ caballieri” Vitorio De Sica .
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El velorio llegaba a su fín y personal de la funeraria ponía manos a la obra acercando la tapa del cajón para cubrir para siempre la estampa de mi pariente de la vista del mundo de los vivos.
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Con paso vacilante, rosario en mano, acariciando sus cuentas nacaradas , una mujer sesentona va recortando su silueta menuda al trasluz de la entrada de la capilla ardiente llegando hasta un costado del cajón , apoyando sus manos e inclinando la cabeza hasta besar la frente de mi querido Angelito , paralizando, para sorpresa de todos, el corolario habitual de un velorio , hasta ese momento sin hechos relevantes para comentar al regreso a casa.
¡Pobrecito mi doctorcito querido ¡.- ¡ Como cuidó a mis padres!.- ¡Operó a toda la familia ¡.
Sin perder el control y haciéndose cargo de la situación , el maestro de ceremonias con la que toda empresa fúnebre cuenta , atento y vigilante , garantizando el desarrollo correcto de la ceremonia llegó de inmediato a la vera de la agradecida y expresiva señora y tomándola cariñosa pero firmemente de los hombros y con el mejor tono , previniendo reacciones desagradables , le dijo:- Señora ,este no es el Dr. Cutro , se llama igual y el doctor está vivo.-
La mujer lo miró fijo abriendo grande los ojos , sus manos se aquietaron cuando del rosario habían pasado tal vez mas de la mitad de las cuentas .
Todo ocurrió en pocos segundos . Su cabeza giró 360º, como faro avisor del papelón que pasaba.- Su cara perdió la máscara de unción con la que había entrado , se irguió recuperada y hasta parecía mas alta que cuando llegó.
¡ Disculpen ¡.- dijo como único comentario y apurando sus pasos tanto como se lo permitían sus piernas flacas , enfiló rumbo a la salida.
Un murmullo con risas mal contenidas fue la melodía que acompañó el cierre del cajón , vehiculo conductor hacia el último destino de Angelito. Completando con el último rito el fínal del velorio en que deudos y amigos se acercan al ataud en busca de una manija , amoroso privilegio , rubricando el afecto hacia el ser querido que parte.
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Homenaje póstumo que ofrendo a mi querido Angelito . Digno broche de humor a quien tanto amó la vida , rió y provocó risas y si hay algo por el cosmo que hace que los muertos vean al contemplar su velorio , seguro que mi pariente volvió a morirse de risa.